"La literatura es una extraña máquina que traga, que absorbe todos los placeres, todos los acontecimientos de la vida y los escritores... los escritores son vampiros"
Bernard Henry Lévi

10 noviembre 2009

Aula de poesía - 10 de noviembre

Para inaugurar la poesía, Alejandro ha traído una elegía de Eloy Sánchez Rosillo ("un murciano") titulada Supón que es agosto y que no estás tan lejos


Supón que aún es agosto y que no estás tan lejos...

...aunque el ser amado esté ausente, a mano están sus imágenes
y su dulce nombre resuena en nuestros oídos.
Lucrecio

Supón que aún es agosto y que no estás tan lejos
de esta ciudad que todavía guarda
los últimos vestigios de aquella altiva llama del verano
que lentamente fue, como todo, muriéndose;
imagina que aun estas aquí, conmigo,
en la paz de esta casa que la luz hace hermosa,
y busca en tu memoria el esplendor dorado
de los días perfectos que en ella -porque así
lo deseó algún dios de mirada propicia-
hemos vivido, ajenos a todo aquello que no fuera
nuestra propia alegría de estar juntos.

Recuerda.
Mira. Mira esas gloriosas
mañanas: hace un rato que tú te despertaste,
y esperas en silencio a que yo abra los ojos
para darme los buenos días y decirme -hoy también-
que eres dichosa.
Y me señalas luego
ese rayo de sol que entra por la ventana
y aquí, junto a la cama, en el suelo, dibuja
un dulce charco de oro.

No dejes que se borren
de tu alma las risas de ese tiempo,
las palabras ardientes que sonaban
como un cristal finísimo y llenaban de música
las horas del amor: el espacio inocente
de la pasión cumplida en las radiantes noches
que nuestros cuerpos conquistaron.

Contempla estas imágenes,
y olvídate de ese lugar que ahora
a tu pesar y a mi pesar habitas:
calles llenas de otoño, gentes que desconocen
nuestra historia, tierras que no son tuyas,
y ese río que en nada se parece
a éste nuestro de aquí, que bajo el sol discurre
a través de los huertos.

Ojalá lleves siempre
contigo, a cada instante, mi recuerdo,
y estas palabras que en la noche escribo
pensando en ti, para que tú las leas,
te ayuden a estar sola,
y te acompañen.

De Páginas de un diario

Alejandro nos ha explicado cómo la poesía consigue presentar como bellos sentimientos que a priori, no lo son, y cómo un poema puede hacer que comprendas sensaciones que ni siquiera has tenido.
Quien haya experimentado el sentimiento que narra el poema, lo reconocerá de inmediato: la sensación de soledad cuando la persona que amas no está contigo; la necesidad de escribirle a cada rato para intentar que esa distancia se acorte; el aferrarte una y otra vez a los recuerdos que tienes con ella, como queriendo vivirlos otra vez, o vivir a través de ellos hasta el próximo encuentro; el miedo a que se olvide de ti; el terror que da pensar que va a dejar de esperarte.

7 comentarios:

B. Ekusor dijo...

Hoy he aprendido una cosa nueva: un poema no necesita rimar para ser bueno.

Anónimo dijo...

A mí me ha dao vergüenza ir, pero ahora veo que tenía que haber ido

Anónimo dijo...

Ojalá hubiera ido. El poema, precioso. :)

Paola dijo...

El poema es bonito, pero la disección de los sentimientos que ha hecho s. me ha dejado casi llorando. El amor, con mayúsculas. Felicidades por la idea.

Anónimo dijo...

Puedes ir aunque no leas nada? Cada martes se lee un poema solo?
lau

Anónimo dijo...

A mí me gustó mucho el poema, y la idea, y me reí mucho. Tengo ganas del martes que viene

maría r. dijo...

he estado leyendo más de este poeta, son todos algo tristes.... pero preciosos